Sinfonía Número 2 en Si bemol mayor
La Segunda Sinfonía fue compuesta entre el 10 de diciembre de 1814 y el 14 de marzo de 1815. Es posible que se haya tocado poco después en Viena, o que su estreno haya tenido lugar en Londres, el 20 de octubre de 1877.
Schubert no fue un compositor profesional. Escribía música por placer y a partir de un impulso inte
rior, pero raras veces prestó gran consideración al hecho de publicar o preservar sus manuscritos para la posteridad o presentarlos más allá de su círculo de amigos. En sus años juveniles nunca ganó dine
ro componiendo. Si hubiera vivido más tiempo, sin duda su actitud hacia el profesionalismo hubiera cambiado, pero murió a la edad de 31 años. De modo que todas sus composiciones son, en un senti
do real, obras tempranas. Si Beethoven hubiera muerto a la misma edad, no hubiera creado más que una sinfonía.
La primera música orquestal de Schubert fue compuesta para la orquesta de estudiantes de Stadkon
vikt, una escuela mantenida por el Estado a la que había asistido . Incluso después de haberse gradua
do, continuó tocando la viola en los ensayos de esa orquesta. También activo miembro de un grupo conocido como La Sociedad de Aficionados. Este conjunto había surgido a partir de un cuarteto de cuerdas familiar y se había desarrollado incluyendo amigos que tocaban diferentes instrumentos. Los
integrantes de la Sociedad tocaban las sinfonías de Haydn y de Mozart, las dos primeras de Beetho
ven y cualquier música que Schubert escribiera para ellos. La calidad de la interpretación era desi
gual. La Sociedad merecía su nombre. La Segunda Sinfonía puede haber sido o no interpretada por la orquesta Konvikt o por la Sociedad de los Aficionados. En cualquiera de ambos casos, la obra rápida
mente quedó sumida en el olvido,mientras Schubert se dedicaba a otras composiciones. Parecía que se interesaba poco por sus manuscritos una vez que habían sido interpretados.Afortunadamente, varios de sus amigos valoraban su música lo suficiente como para hacer y guardar copias. La Sinfonía, como la mayor parte de su música, siguió siendo desconocida durante años. Fue redescubierta y kse realizó su primera presentación profesional en 1877. Se publicó por primera vez en 1884. ¡No fue escuchada en Estados Unidos hasta 1936!
Schubert siempre fue pobre. A veces tenía dificultades incluso para pagar el papel pentagramado que
necesitaba para el gran número de composiciones que fluían casi sin esfuerzo y aparentemente de mo
do espontáneo de su pluma. En la época de su Segunda Sinfonía, ganaba un pobre ingreso ayudando a su padre, que enseñaba en una escuela local. Le disgustaba su trabajo, pues le impedía componer du
rante las mañanas. Realizaba sus tareas de enseñanza mecánicamente. Sin embargo, pudo escribir más música de lo que nunca antes había hecho, en parte debido a que se había adecentado su experien
cia y en parte debido al avance de su técnica, resultado de las lecciones de composición que recibió de Antonio Salieri.
El compositor escribió en todos los géneros durante 1814-1815, aunque su atención estaba puesta principalmente en la ópera. Su ópera más bella, en opinión del estudioso de Schubert, Alfred Eins
tein, data de esa època. Es Claudine von Villa Bella. Actualmente, sólo sobrevive uno de sus tres ac
tos, porque en 1948 los sirvientes de Josef Hüttenbremer, que había sido amigo del compositor y ha
bía guardado varios de sus manuscritos ¡usaron la única partitura para encender el fuego! Es sólo por
pura buena suerte que la Segunda Sinfonía no sufrió un destino similar.
Algunas veces Schubert es criticado plor su falta de concisión. Esta acusación es a la vez verdadera e injusta. Schubert utilizó las formas tradicionales de Haydn, Mozart y Beethoven; sonata, allegro, te
ma, y rondó. Pero la estética de Schubert era diferente de la de sus antecesores. Mientras que la músi
ca de aquellos es concentrada, económica, tiesa y dramática, al de Schubert es pausada y expansiva, El compositor parece haber estado más interesado en sus materiales que en lo que sucediera con ellos.
Debido a que tenía una imaginación maravillosamente inventiva, escribió las más exquisitas de las melodías y las más encantadoras y punzantes de las armonías. Ni siquiera escuchamos la vaguedad de la forma porque siempre nos resulta agradable escuchar estas maravillosas melodías, progresiones y orquestaciones una vez más.
La Segunda Sinfonía ejemplifica esta estética. Los movimientos exteriores son muy largos: más de seiscientos compases en el primero, más de setecientos en el último. Los movimientos interiores son más modestos, pero contienen repeticiones frecuentes. Podemos perdernos fácilmente en las formas sonata de los movimientos exteriores. Schubert emprende el desarrollo cuando todavía está en exposi
ción, llega en una tonalidad aparentemente equivocada, se dilata en las frases, repite.¡La música pare
cería positivamente difusa si no fuera por el muy importante hecho de que es tan hermosa! El modo despreocupado en que Schubert encara la forma clásica funciona solamente porque las melodías y las armonías atraen nuestra atención. por sí mismas.
Quizás pueda discutirse que las formas clásicas, en particular, la forma sonata allegro, son inapropia
das para el tipo de música que escribió Schubert. Quizás esto sea cierto, ya que estas formas son in
trínsecamente dramáticas y la música de Schubert no lo es. Pero había otras formas disponibles y no se podía esperar de un muchacho de 18 años, cuyo genio residía en la melodía y en la armonía, que re
volucionara la música construyendo nuevas estructuras abstractas. Si hubiera vivido un periodo de vi
da normal, quizás hubiera desarrollado nuevas formas apropiadas para su estética de composición. Existen ciertas evidencias de qaue estaba orientado en esa dirección en su última sinfonía, que dejó en estado fragmentario. El apego de Schubert a las formas clásicas en las sinfonías de su juventud no hace desmerecer la música. Una pieza como la Segunda Sinfonía funciona a pesar de su forma, no de
bido a ellla; y esto es lo que ahace que esta música sea drásticamente diferente de la de Mozart, Haynd,y Beethoven. La Segunda de Schubert tiene éxito debido a sus materiales.
Cuando escuchamos a Beethoven, experimentamos la excitación de participar en el drama de los te
mas y tonalidades que se oponen. Cuando escuchamos a Schubert, nuestras respuestas emocionales provienen directamente de las melodías, no de su oposición y resolución
Lo que este argumento dice en realidad es que Schubert fue el primer gran compositor lírico y primer romántico completo. Su música es la primera en la que la belleza de cada momento es portadora de significado. Incluso un compositor tan diferente como Brahms apreciaba este aspecto singular del ar
te de Schubert. Se maravillaba de "La frescura y la despreocupación con la que Schubert ideó el inclu
so escribió (La Segunda Sinfonía)...Captó el deleite genuino en un medio de expresión amplio, pausa
do y musical, que no puede entenderse significativamente en los detalles sobre el material que contie
ne". Foto subida de Internet.
De mi libro "Invitación a la Música" de Jonathan Kramer.
´ Sinfonía Número 2 en Si bemol mayor
Franz Schubert
No hay comentarios:
Publicar un comentario