LA MÚSICA Y SU MUNDO

martes, 9 de julio de 2019

Rapsodia española de Maurice Ravel


                                                                    Rapsodia española

Con excepción del tercer movimiento, que data de 1895, La Rapsodie espagnole fue iniciaa en 1907. La versión para piano a cuatro manos fue terminada en octubre de ese año y la partitura orquestal, el 1 de febrero de 1908. Edouard Colonne dirigió el estreno el 15 de marzo de 1908 en París.
Todo joven compositor francés deseaba ganar el Prix de Rome. Instituido en 1803 y suspendido en 1968, este premio se otorgaba anualmente a un compositor menor de 30 años que fuera ciudadano francés. El premio incluía una beca durante cuatro años, los dos primeros de los cuales debían pasar
se en Roma, el tercero en Alemania o Austria y el cuarto en Roma o en París; existía también la op
ción de hasta tres  años adicionales de apoyo.la  única obligación del ganador era componer. La larga
lista de ganadores incluye a compositores tan distinguidos como Berlioz(1830), Gounod(1839), Bi
zet(1857), Massenet(1863), Debussy(1884), e Ibert(1919). La larga lista también incluye nombres de muchos compositores olvidados. Pero no incluye el nombre de Maurice Ravel, a pesar de sus cinco intentos de ganar el codiciado premio.
El Prix de Rome se entregaba no por la composición original sino más bien por la pericia demostrada patra escribir en las formas tradicionales. Cada solicitante debía presentar una fuga sobre un tema da
do, una cantata sobre un texto dado y una obra coral. En su juventud, Ravel no era especialmente pa
ciente con tales ejercicios académicos y fue descuidado al preparar estas piezas para concurso. Los trabajos que presentó han sido conservados y revelan una sorprendente sequedad y un considerable número de decididos errores. Seguramente tenía la capacidad para producir música académica correc
ta, pero carecía de temperamento. Para la época en que ya había fallado varias veces en la obtención del  premio, Ravel era un compositor famoso. Sus repetidos fracasos se convirtieron en un escándalo
público. El compositor estaba totalmente desilusionado con los jurados y disgustado con el proceso de selección. Después de ignorar la competencia en 1904, decidió intentarlo una última vez en 1905,
justo antes de alcanzar la edad límite de 30 años. Para entonces, ya había compuesto varias obras her
mosas y originales, incluyendo el Cuarteto para Cuerdas, la pieza para piano Jeux d'eau y las cancio
nes orquestales Shéhérazade, El jurado examinó las composiciones que se habían requerido de Ravel y dictaminó que no tenía ni siquiera la capacidad técnica para ser finalista. Esta decisión provocó un furor que llegó a  la primera página de los periódicos. Este affaire Ravel se intensificó cuando reveló que los seis finalistas erran alumnos de composición del mismo profesor en el Conservatorio de París,
que también era integrante del jurado. Hubo ataques personales a los miembros del jurado y hubo con
traacusaciones. Como resultado, todo el proceso de selección quedó bajo el escrutinio del público, el curriculum del Conservatorio fue atacado encarnizadamente por su conservadurismo y por su énfasis
en la técnica en lugar del arte y el director del Conservatorio así como varios miembros de la facultad dimitieron.
Ravel no recibió el Prix de Rome. Pero su carrera se benefició por toda la publicidad, inconmesurada
mente, más de lo que se hubiera beneficiado si ganaba el premio. Se le vio como un  enfant terrible, un vanguardistaa embarcado en la eterna batalla entre los académicos que preservan una tradición pa
sada de moda y los artistas sde la nueva ola. Ahora todo el mundo quería escuchar la música del jo
ven a quien el establishment musical francés había rechazado. Sus obras fueron tocadas en toda Euro
pa Occidental, África del Norte y Estados Unidos. Se hizo famoso como uno de los principales com
positores de Francia, el probable sucesor de Debussy como el más grande compositor vivo de Fran
cia.
Ravel respondió a esta atención con una ráfaga de actividad de composición. Una de sus nuevas obras fue la Rapsodia espagnole. En el estreno, esta pintura colorida de España encantó a algunos oyentes y enfureció a otros. Algunos críticos la alabaron, en tanto que otros la desestimaron como débil, incohe
rente, laboriosa y pedante. En el estreno hubo algunas protestas audibles después del segundo movi
miento. Uno de los integrantes de un grupo de amigos de Ravel, denominado los Apaches, gritó des
de la galería:"¡Una vez más, para el público de abajo, que no entendió!" El director Edouard Colonne le complació repitiendo el movimiento, después del cual, el mismo Apalache gritó:
"¡Dígales que es Wagner y les encantará!"
Semejante apoyo a una nueva obra, especialmente ante la reacción negativa del público filisteo, era tí
pico de los Apalaches, un grupo de "exiliados artísticos", como se llamaban a sí mismos. El grupo, que había comenzado a reunirse después de los conciertos en 1902, incluía compositores, intérpretes,
poetas, artistas visuales, críticos e intelectuales. Entre ellos intercambiaban ideas sobre las últimas creaciones de las artes, se reunían regularmente para hacer largos comentarios, ponían sobrenombres
a sus miembros( el de Ravel era "Rara") y asistían juntos a funciones importantes. Una vez, a la sali
da de un concierto,algunos miembros del grupo accidentalmente tropezaron con un hombre que ven
día periódicos. Airado, este los llamó "Apaches", término de la jerga  francesa que quiere decir"jóve
nes camorreros". Al grupo le gustó el término y decidió adoptarlo como su nombre oficial.
El saludo secreto de los Apaches era silbar el tema de la apertura de la Segunda Sinfonía de Borodin. Eligieron esa obra debido a su entusiasmo por la música rusa. Los Apaches también tenían un miem
bro imaginario llamado Gómez de Riquet, inventado por Ravel con el propósito de evitar que se unie
ran al grupo tediosos aspirantes a miembros. Cada vez que uno de estos aburridos llegaba a una reu
nión Apache, un miembro regular "recordaba" convenientemente que se los había invitado a tomar un trago en la casa del legendario español Gómez de Riquet. Con grandes disculpas el grupo se marcha
ba, dejando atrás al perplejo intruso.
Ravel estaba interesado en la música exótica. Por eso encontramos los sonidos de la música folclóri
ca húngara  en su Tzigane y del jazz norteamericano en su Concierto para Piano. En 1907 estaba in
teresado especialmente en la música española. Sus dos obras principales de ese año fueron la ópera  L'Heure espagnole ("La Hora Española") y la suite orquestal Rapsodie espagnole("Rapsodia españo
la"). En realidad,el interés profundo de Ravel por España se remonta a sus primeros años. Su pueblo
natal estaba cerca de la frontera española, así que creció en medio de la cultura vasca. Su madre ha
bía pasado su juventud en Madrid y a menudo cantaba canciones folclóricas españolas a su hijo pe
queño. Por lo tanto no es sorprendente que la primera obra de Ravel de cierta importancia haya sido la danza española Habanera, escrita para dos pianos en 1895. Posteriormente transcribió esta pieza para orquesta, convirtiéndola en un tercer movimiento de la Rapsodie espagnole.
La comprensión que tenía Ravel de la música española era más que superficial, como lo demuestra en Rapsodie. Penetró el espíritu dela música española más profundamemte que otros compositores no es
pañoles como Edouard Lalo en su Sinfonie espagnole. Emmanuel Chabrier en su España y Rimsky-Korsakov en su Capriccio espagnole. Ravel no citó música folclórica verdadera, pero usó los modos, ritmos, instrumentos de percusión y giros melódicos españoles de una manera tan auténtica que inclu
so un compositor tan absolutamente español como Manuel de Falla quedó impresionado.
La obra consta de un preludio y tres danzas españolas: malagueña(una danza popular originada en Má
laga), habanera(una danza lenta originada en África y que fue llevada a Cuba) y feria. Foto subida de Internet.
De mi libro "Invitación a la Música" de Jonathan Kramer.





                                                                 
                                                  Rapsodia española de Maurice Ravel

                     




                                                                             

                                                                          Maurice Ravel










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