Sinfonía Número 4 en Re menor, Opus 120
La Sinfonía en Re menor fue compuesta entre los meses de mayo y septiembre de 1841 y estrenada el 6 de diciembre del mismo año, en Leipzig. Schumann revisó la obra entre el 13 y el 19 de diciembre en 1851. Dirigió el estreno de la versión final el 30 de diciembre de 1852, en Düsseldorf.
el 13 de septiembre de 1841 fue un día especial para Clara Schumann. No sólo celebraba su vigésimo segundo cumpleaños, sino que también era el día del bautismo de su primera hija, Marie. Además, el día anterior había sido el primer aniversario de su matrimonio. Su esposo le ofreció a Clara un regalo
especial de cumpleaños/aniversario: la partitura de una nueva sinfonía, concebida como retrato de su esposa. La sinfonía, que finalmente se conoció como la Número 4 en Re menor, está impregnada por una melodía que es una versión de lo que Schumann llamaba su tema "Clara". Lo había usado ante
riormente en buen número de otras obras: aparece primero en David Sbündlertänze, una obra para pia
no escrita cuando Schumann empezó a pensar seriamente en casarse con Clara.
Los primeros años del matrimonio de Schumann fueron un período de intensa actividad de composi
ción. Escribió más de 50 canciones en 1840, que llegó a conocerse como su año de la canción. 1841 fue el año de la sinfonía: Schumann compuso la Primera Sinfonía, la Sinfonía en Re menor y una obra que es esencialmente una sinfonía sin el movimiento lento, la Obertura, Scherzo y Final. Al año siguiente se concentró en la música de cámara, terminando tres cuartetos para cuerdas, el Cuarteto para Piano y el
Quinteto para Piano.
En 1841 Schumann empezó Obertura, Scherzo y Final, unos días después de poner fin a la Primera Sinfonía. Inmediatamente después de terminar esa obra, continuó con lo que se convirtió en el pri
mer movimiento de su Concierto para Piano. No bien terminó ese movimiento, Clara anotó en su dia
rio: "Ayer empezó otra sinfonía. Hasta ahora no he escuchado nada de ella, pero a veces capto el soni
do de un feroz Re menor en la distancia y puedo ver, por el modo en que actúa, que será otra obra ex
traída de las profundidades de su alma. El cielo se inclina a nuestro favor e incluso Robert no puede estar más gratamente feliz con su trabajo de lo que yo lo estoy cuando por fin me muestra lo que ha
compuesto."
Antes de terminar el año dela sinfonía, Schumann no sólo había terminado tres sinfonías sino que tam
bién había esbozado otra en Do menor(que nunca terminó) y casi terminado una obra para coro y or
questa.
La Sinfonía en Re menor( registrada como Número 2) y Obertura Scherzo y final (fueron presentadas al público en el mismo concierto. El resto del programa consistió en dos obras para piano de Franz Listz, una tocada por el propio Liszt y otra en la que Clara se le unió en un dúo. Schumann había aguardado ansiosamente este concierto; esperaba que le ayudara a consolidar su ya reciente reputa
ción. Pero nadie podía competir con Liszt. Liszt era una personalidad dominante de la escena y la presentación de sus propias obras virtuosas para teclado ensombreció las sinfonías de Schumann. El público apenas pareció notar las dos obras orquestales. El descorazonamiento de Schumann se hizo aun más amargo por el hecho de que Clara, al tocar el dúo, sin quererlo había contribuido a que toda la atención se concentrara en Liszt)
Aunque era consciente del magnetismo personal de su amigo como intérprete, Schumann culpó de la indiferencia del público no a Liszt sino a sus propias obras orquestales. Abandonó la sinfonía y la ar
chivó en su escritorio durante una década. Al final la reorquestó e hizo unos pocos cambios estructu
rales menores. Su procedimiento para reorquestarla fue excéntrico. Empleó a una persona para que volviera a copiar la versión original de las partes de cuerdas en algunos pasajes, dejando espacio en el papel para agregar nueva música de vientos, bronces y percusión, que luego Schumann completó. De este modo,la reorquestación no afecta a las cuerdas y no les permite responder a los cambios introdu
cidos en las partes de los vientos.
En mayo de 1853, el trigésimo primer Festival de Música del Bajo Rin reunió una orquesta de 160 músicos y un coro de 490 miembros para tocar extractos del Mesías de Haendel. Elías de Mendel
ssohn y Alceste de Gluck. El distinguido violinista Joseph Joaquim tocó el Concierto para Violín de Beethoven, bajo la dirección de Schumann, y Hiller dirigió la Novena Sinfoía de Beethoven. El festi
val se abrió con la nueva versión de la Sinfonía en Re menor de Schumann, ahora registrada como
Número 4(Schumann había publicado dos sinfonías más desde el momento en que dejó de lado la Sin
fonía en Re menor en 1841). El festival se cerró con una obra que Schumann había compuesto espe
cialmente para la ocasión: Obertura Festival de la Canción del Vino del Rin, para orquesta con coro.
Aunque Schumann ya tenía años de experiencia como director, cuando revisó la sinfonía, en cierto sentido hizo una orquestación menos adecuada que la versión original. Es más densa, menos solista y,
a veces, verdaderamente pomposa. Un estudioso de Schumann, Brian Schlotel, cree que la orquesta
ción más densa fue resultado directo delas experiencias de Schumann en el podio: como no era un di
rector particularmente eficaz, quizás haya decidido (puede ser que subconscientemente) escribir músi
ca que "se tocara sola" o incluso que no se viera afectada demasiado drásticamente si varios miem
bros de la orquesta no asistían a los ensayos. Por otra parte, en la nueva versión hay mejoras decidi
das, tanto de la orquestación como de la estructura. Brahms fue del primero de distintos músicos en preferir la versión original e hizo arreglos, a pesar de la desaprobación de Clara, para que fuera publi
cada treinta años después de la muerte de Schumann. Actualmente, la mayoría de los directores usa la versión final, incorporando posiblemente algunos delos detalles de orquestación más ligeros de la ver sión original.
El tema "Clara", que abre la sinfonía, regresa bajo muchas apariencias diferentes a lo largo dela pieza.
Unificar de este modo una composición de varios movimientos fue una forma especialmente popular
entre los compositores románticos que siguieron el ejemplo de Beethoven (la figura rítmica de cua
tro notas que abre la Quinta Sinfonía, por ejemplo, regresa en todos los movimientos con apariencias diferentes). A medida que se acelera la introducción lenta de Schumann, en su transición hacia la par
te principal más veloz del primer movimiento, el tema de las corcheas(un arpegio ascendente seguido
de un motivo gradual descendente) que se repite una y otra vez contiene(notas 5-8) un fragmento de la figura de Clara. Cuando esta idea se convierte en el tema principal del allegro, se establece un lazo entre las dos secciones del movimiento. Como el tema secundario es prácticamente el mismo que el tema principal pero en otra clave, todos los materiales del principio del movimiento están generados por la idea melódica de la apertura. Incluso una nueva melodía lírica que aparece durante la sección de desarrollo tiene incluido en ella el motivo de Clara.
Otro medio que emplea Schumann para aumentar la unidad es hacer que los movimientos se toquen sin pausa. El final poco concluyente del primer movimiento nos impulsa hacia el segundo, marcado romanza. Después de una melodía plañidera en el oboe y en los violonchelos, las cuerdas superiores presentan el tema de Clara en forma perecida a como fue tocado en el primer movimiento. La contras
tante sección media presenta un solo de violín que decora un nuevo tema.
El vigoroso tema del scherzo también contiene el motivo de Clara, esta vez tocado en inversión(al revés). La sección del trío trae de nuevo la música del solo del violín del segundo movimiento. A su
fin el scherzo se enlentece pero no concluye verdaderamente. Se desvanece en la introducción lenta al final.
El final comienza con una nueva versión del final de la introducción del primer movimiento, que con
tiene el motivo de Clara. Como en el primer movimiento, este material también forma parte del tema final del allegro. La sección de desarrollo comienza con un fugato basado en el segundo tema. En la coda la música se torna gradualmente más rápida a medida que avanza hacia una conclusión triunfal.
Una pregunta que sigue sin respuesta es hasta que punto el hecho de derivar diferentes melodías de un motivo de origen común unifica realmente una composición. Si la "misma" sinfonía fuera interpreta
da con diferentes melodías que sustituyeran a las de Schumann pero conservaran la orquestación y la estructura armónica, ¿estaría la pieza menos unificada? En música, la unidad está dada por medios más profundos y más complejos que simplemente usar la misma figura de cinco notas en diferentes contextos. De hecho, algunas piezas inferiores que no parecen particularmente unificadas pueden, no obstante, mostrar derivaciones cuidadosas de las melodías a partir de materiales anteriores. De modo
que la coherencia temática no garantiza nada. ¿Por qué entonces Schumann se ocuparía de ello? Agrega en efecto un interés adicional y proporciona a los oyentes algo muy tangible a lo que prestar atención mientras escuchan la pieza. La derivación de la mayoría de los materiales de la Cuarta Sinfo
nía del tema de Clara es fascinante de seguir, pero es un error creer que esta derivación crea, en lugar de simplemente reforzar, la unidad estructural. Foto subida de Internet.
De mi libro "Invitación a la Música" de Jonathan Kramer.
Sinfonía Número 4 en Re menor, Opus 120
Robert Schumann
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