Sinfonía Numero 4,Opus 29, La Inextinguible
La Cuarta Sinfonía fue iniciada en 1914 y terminada en enero de 1916. Nielsen dirigió el estreno en Copenhague el 1 de febrero de 1916.
La Cuarta Sinfonía marcó un momento de cambio para Nielsen. Empezó a componerla cuando dejó su cargo como director de ópera. En la Cuarta dejó atrás el estilo idílico que está ejemplificado del mejor modo por la Tercera Sinfonía. Ahora adoptaba un idioma más punzante y más dramático carac
terizado por el conflicto. Posiblemente este sentido del conflicto provenía de su preocupación respec
to de la situación mundial: la Cuarta fue escrita durante los primeros años de la Primera Guerra Mun
dial. Cuando la sinfonía fue estrenada en 1916, produjo un impacto inmediato. El máximo éxito del compositor consolidó su preputación como el compositor más grande de Dinamarca.
Aunque Nielsen se creía en la música de programa explicita, en la que una composición describe una
historia con cierto detalle, a menudo tenía en mente una idea filosófica mientras componía. En 1914 escribió al cantante de ópera Emil Holm sobre la Cuarta Sinfonía:
Puedo decirle que estoy bastante avanzado en una nueva obra orquestal a gran escala, una especiel de sinfonía de un solo movimiento, que está destinada a representar todo lo que el sentimos y pensa
mos sobre la vida, en el más fundamental sentido de la palabra,es decir todo lo que tiene la voluntad de vivir y de moverse. Todas las cosas pueden incluirse en este concepto y la música es una manifesta
ción de la vida, más que otras formas del arte, ya que está completamente muerta(cuando no suena) o completamente viva y de este modo puede expresar el concepto de la vida exactamente a partir de su manifestación más elemental hasta la emoción más sublime.
En correspondencia posterior, escrita después de la terminación de la Sinfonía La Inextinguible, Niel
sen amplió esta idea.
El título La Inextinguible no es un programa sino una señal para el adecuado dominio de la música . Está destinada a expresar la apariencia de las fuerzas más elementales comunes a los hombres, a los animales e incluso a las plantas. Podemos decir que , aun en el aso de que todo el planeta fuera devas
tado por el fuego, el diluvio,los volcanes,etc, y que todas las cosas quedaran destruidas y muertas,la naturaleza otra vez comenzaría a generar una nueva vida, comenzaría a empujar hacia adelante otra vez con todas las fuerzas buenas y poderosas inherentes a la materia. Pronto las plantas empezarían a multiplicarse, se verían y oirían las crías y el canto de los pájaros, se experimentarían las aspiraciones y los anhelos del hombre. He tratado de representar esas fuentes "inextinguibles".
A partir de estas ideas podemos comprender el origen de los conflictos que se encuentran en la sinfo
nía. En efecto, contiene más contrastes que cualquier otra sinfonía de Nielsen. También conocemos los aspectos más profundos del amor a la naturaleza que experimentaba el compositor. Naturaleza pa
ra él no era simplemente árboles, praderas, arroyuelos y vida salvaje. Representaba la fuerza de la vi
da. La obra es optimista: describe tensiones profundas, las fuerzas de la vida-representada por música consonante y diatónica-triunfan al final.
Los conflictos musicales no se presentan sólo entre los diferentes estados de ánimo y los diferentes es
tilos sino también entre las distintas áreas tonales. La Cuarta de Nielsen no está tanto en una tonali
dad como"dentro" de una tonalidad:Mi mayor.La gran originalidad de Nielsen radica en su modo de encarar la tonalidad.La sinfonía no establece su tonalidad al comienzo. Más bien, Mi mayor es el ob
jetivo de todas las luchas. Cuando finalmente emerge hacia el final de los movimientos primero, ter
cero y cuarto, lo hace con triunfante afirmación. Este modo de envarar la tonalidad o marcadamente diferente respecto del utilizado por los compositores anteriores.La mayor parte de la música tonal se desarrolla en una tonalidad. Logra su drama a partir de la manera en que esta tonalidad, una vez esta
blecida, se ve amenazada del modo en el que la música se aleja de ella y del modo en el que vuelve. La estabilidad de la tónica nunca está en duda. Más bien, el interés reside en la forma como se vuelve a lograr la tonalidad. Sin embargo, en la Cuarta de Nielsen, el resultado último es menos seguro, de modo que existe una corriente subterránea de inquietud incluso en los pasajes más líricos. El surgi
miento de Mi mayor constituye una afirmación, no una reafirmación.
La idea de Nielsen sobre una sinfonía de un solo movimiento no se había perdido totalmente cuando terminó. La Inextinguible de cuatro movimientos. Los movimientos siguen uno a continuación del otro sin pausa: un artificio relativamente común en las sinfonías del siglo XIX. Pero Nielsen va más lejos. Ningún movimiento excepto el último termina verdaderamente. El primero se desintegra en una
transición hacia el segundo. El segundo también declina en preparación de la dramática nueva entrada
de los violines altos (que tocan mayormente acompañamientos en pizzicato a lo largo del segundo mo
vimiento) al comienzo del tercero. El tercero está ligado con el cuarto por una transición virtuosa de las cuerdas.
Además de los enlaces entre los movimientos, Nielsen entrelaza la sinfonía mediante material temáti
co común, lo cual se hace especialmente notable en el segundo tema del primer movimiento. Esta me
lodía larga, pausada y lírica, que primero se escucha en los clarinetes, regresa a menudo a todo lo lar
go del resto de la pieza. Poco después de su desarrollo inicial, se la introduce nuevamente en los clari
netes, sólo para ser interrumpida de un modo tenso y disonante en los bronces. Es además la última melodía del primer movimiento.De esta manera,su relación con la melodía de tipo folclórico del scherzo, también en los clarinetes a los que ahora se unen los fagotes, es muy evidente. Incluso la apertura intensa del adagio está relacionada con esta melodía.La melodía regresa a su forma original cuando el final alcanza triunfalmente el objetivo de la tonalidad Mi mayor.
El rasgo más sorprendente del final es el duelo entre los dos conjuntos de timbales, que según la indi
cación de Nielsen deben colocarse muy lejos uno del otro. Dos veces durante el último movimiento, los timbales irrumpen en un diálogo feroz. Nielsen pide que los percusionistas toquen de modo ame
nazante. La intrusión de labatalla de tambores anticipa el uso posterior que hizo Nielsen del tambor militar, como antagonista, en el Concierto para Clarinete y en la Quinta Sinfonía.
Nielsen proporcionó un breve prólogo en la partitura de la Inextinguible: "Con este título el composi
tor ha intentado indicar en una palabra lo que la música sola es capaz de expresar por entero:"la volun
tad elemental de la vida". La música es la vida y, como ella, es inextinguible. El título dado por el compositor a su obra musical podría por lo tanto parecer superfluo; no obstante el compositor ha em
pleado la palabra para subrayar el carácter estrictamente musical de su tema. No es un programa sino sólo una sugerencia del modo correcto de abordar la música."
Tal como la vida persiste, así el tema lírico del primer movimiento se mantiene a todo lo largo y regre
sa, en cierre, a su forma original. Tal como la vida se desarrolla hacia el orden a partir del caos, asi la sinfonía logra la estabilidad de Mi mayor hacia el final. Tal como lasluchas de la vida están subyuga
das por la vida misma, así los timbales que luchan en el final están sometidos en la textura global, a medida que la música arrasa hacia su final triunfante. Foto subida de Internet.
De mi libro "Invitación a la Música" de Jonathan Kramer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario