Primavera en los Apalaches
Fue compuesta en 1943-1944 como ballet para Marta Graham, quien lo estrenó con su compañía en la Biblioteca del Congreso de Washington, D.C el 30 de Octubre de 1944. Cuando Copland hizo una ver
sión condensada en 1945, incrementó la instrumentación original de 13 intérpretes para orquesta com
pleta.
Como la mayoría de los compositores de su generación, Aaron Copland en un principio se sintió esti
mulado por las armonías disonantes y los ritmos entrecortados que escuchó en la década del 20. Pero
también se preocupó por la inaccesibilidad de la música moderna. Prefirió crear un lenguaje musical
que fuera esencialmente norteamericano, a fin de hablar directamente a las audiencias norteamericanas.
Al principio trató de incorporar elementos de Jazz en sus obras sinfónicas, pero obtuvo un éxito muy
limitado. Se necesitaba un enfoque más drástico, por lo tanto, a fines de la década del 30 el composi
tor dio deliberadamente la espalda a su estilo disonante anterior. Creó una serie de obras simples,direc
tas y muy consonantes.
"Duranate esos años empecé a sentir una creciente insatisfaccíón con respecto a las relaciones entre el público amate de la música y el compositor viviente . El antiguo público "especial" de los conciertos de música moderna había desaparecido y el público convencional de conciertos seguía siendo apático o indiferente a cualquier otra cosa que no fueran los clásicos establecidos . Me parecía que los composi
tores estábamos en peligro de trabajar en medio del vacío. Por otra parte, se había generado un públi
co enteramente nuevo para la música, alrededor de la radio y el fonógrafo. No tenía sentido ignorarlos
y continuar escribiendo como si ese público no existiera. Sentía que merecía la pena el esfuerzo de des
cubrir si no podía yo decir lo que tenía que decir en los términos más simples posibles."
Fue así como nació la estética del popularismo musical de Copland. El compositor se daba cuenta de que los medios de comunicación habían aumentado considerablemente la magnitud, pero no la sofisti
cación del público oyente de la música. Consideraba que el modo de llegar a esa amplia audiencia era hacer música no solo para conciertos sino también para la radio, cine,los discos y el ballet. En su esti
lo populista empleó elementos carcterísticos de la cultura popular norteamericana como las canciones de cowboys, los ritmos latinoamericanos, las canciones folclóricas y los himnos de Nueva Inglaterra y de los Shaker. La música que resultó era tan inmediata como simple. Es quizás sólo una coincidencia, pero seguramente interesante que la obra que corona el populismo musical de Copland-el ballet Prima
vera en los Apalaches- incluye un conjunto de variaciones sobre la melodía de un himno de Shaker que
alaba la simmplicidad:
FEs el ldon de ser simple,
Es el don de ser libre,
Es el ldon de descender,
Adonde debemos estar,
Y cuando nos encontramos
En el lugar correcto,
Eso será el valle del
Amor y el Deleite.
A pesar de su atractivo directo, Primavera en los Apalaches está realizada con una destreza y una suti
leza consumadas, de modo que su simplicidad no está trivializada. Tipifica la filosofía de muchos com
positores norteamericanos de la década del 30 y del 40. "Queríamos encontrar una música que hablara de cosas universales en un lenguaje vernáculo que reflejara los ritmos del habla norteamericana. Que
ríamos escribir música en un nivel que dejara la música popular muy atrás: música con una grandeza de expresión totalmente representativa del país que Whitman había imaginado".
La música que Copland escribió para el ballet de Marta Graham, Primavera en los Apalaches, refleja su deseo de crear una música no estilística, una música que exprese las experiencias y las visiones de un arista norteamericano. Varios años antes él había escrito: "Creció en mi interior la convicción de que las dos cosas que siempre parecían haber estado tan separadas en Norteamérica-la música y la vi
daque se desarrollaban a mi alrededor- debían tocarse entre sí. Este anhelo de hacer que la música que yo deseaba escribir emanara de la vida que había vivido enNorteamérica se convirtió en iuna preocupa
ción". El compositor explicó la relación de esta música con la tradición del canto folclórico en los Sha
kers:
Primavera en los Apalaches, por lo general, se considera inspirada en el folclore. Pero... la tonada de los Shakers"Es el don de ser simple" es el único material folclórico que verdaderamente he citado en la pieza. Ritmos y melodías que sugieren un cierto ambiente norteamericano... y el uso de temas folcló
ricos específicos...no son, después de todo, la misma cosa.
Como se sabe, me llevó casi un año terminar Primavera en los Apalaches y originariamente estaba or
questada para ser sólo trece intérpretes. Recuerda que pensaba que era una locura dedicarle todo ese tiempo, porque sabía la corta vida que tienen la mayoría de los ballets y sus partituras. Pero la suite pa
ra orquesta sinfónica que extraje de la Primavera en los Apalaches fue premiada con el Premio Pulitzer en 1945 y cobró vida propia. Realmente, tuvo mucho que ver con llevar mi nombre a un público más amplio.
De acuerdo con la Graham, el ballet se refiere a una celebración de pioneros, en la primavera, alrede
dor de una granja recién construida de las colinas de Pennsylvania en la primera mitad del siglo pasa
do. La recién por casarse y el joven granjero, que es su marido, personifican las emociones, alegres e
inquietas a las que invita su nueva relación doméstica. Un viejo vecino sugiere de vez en cuando la só
lida confianza en la experiencia. Un predicador y sus seguidores recuerdan a los fundadores de nuevo hogar los extraños y terribles aspectos del destino humano. Al final dejan a la nueva pareja tranquila y
segura en su nueva casa".
Por el año 1943 Marta Graham era reconocida como la principal coreógrafa de danza moderna del
país, pero todavía no había creado una danza para música original.
Gracias a la patrocinadora de las artes, Elizabeth Sprague Coolidge, la Graham pudo encargar una par
titura a Copland. Ella decidió basar el ballet en los recuerdos de la infancia de su abuela de 90 años, que había pasado la mayor parte de su vida en una granja de Pennsylvania. La música estuvo termina
da mucho antes de que Copland supiera el título que la Graham había elegido. Descubrió justo antes del estreno que la coreógrafa había escogido el nombre de la danza ( y por lo tanto el de la pieza), de un poema de Hart Crane.
El estreno tuvo lugar en la Biblioteca del Congreso, donde habían sido estrenadas muchas de las obras
encargadas con los fondos que provenían de Elizabeth Sprague Coolidge. El concierto fue un tributo especial, en su octagésimo cumpleaños a la dama que había producido un tremendo impacto en la músi
ca norteamericana contemporánea. Como la Segunda Guerra Mundial estaba todavía en pleno fragor, todo lo que ingresaba en la Biblioteca del Congreso debía ser inspeccionado. Los trajes de la Graham,
la plancha, la tabla de planchar y los vestidos fueron cuidadosamente revisados en busca de bombas.
La función fue un éxito rotundo.
Posteriormente, Copland hizo una suite de concierto a partir del ballet, que fue grabada bajo la batuta de Serge Koussevitzky. Como fue esta grabación la que por primera vez acercó la música de Copland
a una audiencia extensa, Primavera en los Apalaches cumplió el ideal del compositor respecto de la mú
sica de y para el pueblo norteamericano difundida a todos ellos a través del fonógrafo y la radio.
De mi libro " Invitación a la Música" de Jonathan Kramer. Fotos subidas de Internet.
- Aaron Copland
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