Concierto Numero 1 en Re mayor para Corno y Orquesta,K, 412, Concierto Número 2 en Mi bemol mayor para Corno y Orquesta. K, 417, Concierto Número 3 en Mi bemol mayor para Corno y Orques
ta. K, 447 y Concierto Número 4 en Mi bemol mayor para Corno y Orquesta, K. 495.
El Primer concierto para Corno fue compuesto en Viena en 1791, aunque los movimientos quizás ha
yan existido antes como piezas independientes. El segundo concierto quedó concluido el 27 de mayo de 1783.El Concierto Número 3 probablemente fue escrito en Viena en 1786 o 1787, aunque el movi
miento lento se remonta la año 1784. El Cuarto Concierto quedó concluido el 26 de junio de 1786, en Viena. El solista de los cuatro conciertos fue Ignaz Leutgeb.
Como el resto de la música para instrumentos de vientos solistas, los conciertos de Mozart para corno
y orquesta fueron compuestos para uno de sus amigos. El solista al que estaban destinados erra Ignaz Leutgeb. Mozart había conocido a Leutgeb cuando ambos vivían en Salzburgo. El compositor había estado empleado por el arzobispo Colleredo, en cuya orquesta tocaba Leutgeb. Leutgeb se mudó a Viena en 1777 y Mozart le siguió en 1781. Allí el intérprete de Corno trató de complementar sus in
gresos, con la ayuda de un préstamo del padre de Mozart.
Aunque los conciertos para corno escritos por Leutgeb sugieren que este debe de haber sido un intér
prete extraordinario, por otro lado aparentemente era un simplón inculto, a menudo objeto de las bro
mas pesadas de Mozart. El compositor una vez admitió "Nunca me puedo resistir a poner en ridículo a Leutgeb."
Mozart se burló de Leutgeb en varias composiciones para corno.Por ejemplo,el Quinteto( K. 407) pa
ra Corno, Violín, Dos Violas y Violonchelo( una combinación extraña, ya que tres de los cinco instru
mentos comparten el registro intermedio) está plagado de bromas a costa del intérprete del corno, cu
yo limitado instruento no puede tocar todas las notas de la escala. A todo lo largo del final del Primer
Concierto, Mozart escribió numerosas observaciones, instrucciones para la interpretación, exclamacio
nes y comentarios para Leutgeb. El compositor incluyó en el manuscrito de este movimiento un dibu
jo de Leutgeb tocando el corno. El Segundo Concierto lleva una dedicatoria: " W. A. Mozart e apiadó
de eses asno, buey y tonto de Leutgeb en Viena, el 27 de mayo de 1783". El manuscrito del Cuarto Concierto fue escrito con tinta roja, azul, verde y negra, aparentemente para confundir al intérprete.
Como todavía no se había inventado el sistema de válvulas para los instrumentos de bronce, Mozart
escribió sus conciertos para corno para el corno natural. Este instrumento solamente erra capaz de pro
ducir ciertas notas, es decir aquellas que se encuentran en la serie armónica del diapasón fundamen
tal del instrumento. Este diapasón es Re en el caso del Primer Concierto, ya que la obra está en esa to
nalidad y Mi bemol en el caso de los demás conciertos. Como los armónicos superiores están más cer
ca entre sí que los inferiores, el corno natural podía tocar pasajes de la escala en registro alto pero só
lo arpegios en su gama baja. Las notas adicionales podían producirse"pisando" el instrumento inser
tando la mano bien dentro de la campana a fin de elevar el diapasón medio paso. Sin embargo, el pi
sar también ensordece el sonido. Así que las notas pisadas sobresalen por el timbre. Mozart trató de convertir esta limitación en una ventaja, ya que en ciertos pasajes la sonoridad especial del corno pi
sado agrega una interesante acentuación. Leutgeb debió haber usado una buena cantidad de notas pi
sadas en la Romanza del Cuarto Concierto, por ejemplo, ya que ese movimiento es sorprendentemen
te cromático. El efecto de pisar se pierde cuando los conciertos se interpretan en los modernos instru
mentois de válvulas, aunque los cornos recientes tienen mucha mayor agilidad.
La historia del Primer Concierto es confusa. Se creía que había sido escrita en 1782, y que el segun
do movimiento había sido revisado extensamente en 1787. Las investigaciones más recientes sugie
ren que en realidad esa revisión fue llevada a cabo después de la muerte de Mozart por un editor anó
nimo. El musicólogo Alfred Einstein creía que los dos movimientos se originaban en piezas diferen
tes, pues sus orquestas difieren: los fagotes de primer movimiento están omitidos en el segundo. Otro
musicólogo, Alan Tyson, ha establecido la fecha de la composición en 1791. Por qué el concierto tie
ne sólo dos movimientos es una pregunta que sigue abierta.
El Tercer concierto Tiene una sutilieza y uan profundidad que van más allá de lo que se encuentra en los otros conciertos. Las exigencias que Mozart impone a Leutgeb son tanto expresivas como técni
cas. ¿Pudo el compositor realmente haber esperado que el hombre a quien ridiculizaba como un simplón tuviera la profundidad emocional como para proyectar obra?
Las limitaciones del corno natural parecen haber motivado ciertas alteraciones en la forma del con
cierto normal, especialmente en los primeros movimientos. Como el movimiento puede tocar fácil
mente en una sola tonalidad quizás sea imposible en otra. De modo que Mozart tuvo que modificar el
patrón normal de relaciones, sonoridades y temas, con el propósito de asegurar que cualquier melodía
que desease que el corno interpretara se produjera en una tonalidad apropiada. Por ejemplo, el suave segundo tema del K. 495, que se escucha inicialmente en los violines ( a los que, después de dos com
pases, se suma el oboe) inmediatamente después de la apertura del pasaje forte, no se traslada al cor
no en el lugar esperado. El corno natural no puede tocarlo convenientemente en la tonalidad dominan
te. En cambio, los violines retoman la melodía cuando llega en el dominante, mientras el corno acom
paña. Es sólo mucho después, en la recapitulación, cuando el corno por fin puede tocarla, en la tóni
ca. En los demás conciertos se producen ajustes similares a la forma de sonata normal.
Los movimientos lentos de los Conciertos Segundo y Cuarto están en Si bemol mayor, en tanto que la Romanza del Tercero está en La bemol. Debido al corno natural, las diferencias son considerables. Los grados de escala que deben pisarse difieren( pues los tres Conciertos están escritos para Corno en Mi bemol) y así el movimiento lento del K. 447 tiene su propio registro especial, comparado con el de los dos conciertos en Mi bemol( El Primer Concierto no tiene ningún movimiento lento). Cuando el corno elude las notas pisadas, sólo toca notas de la serie armónica. Las figuras armónica tienden a sonar como ffanfarrias y llamadas de caza, ya que el corno de caza tradicional es un instrumento sin válvulas. Así que no es sorprendente hallar fanfarrias de caza, particularmente en los finales de los cuatro conciertos.
De mi libro "Invitación a la Música" de Jonathan Kramer. Foto subida de Internet.
,
Mozart
No hay comentarios:
Publicar un comentario