LA MÚSICA Y SU MUNDO

lunes, 31 de mayo de 2021

Sinfonía en Tres movimientos de Igor Stravinsky

                                                          Sinfonía en Tres movimientos

La sinfonía en Tres Movimientos fue compuesta entre el 4 de abril de 1942 y el 7 de agosto de 1945. Stravinsky dirigió el estreno con la Orquesta Filarmónica de Nueva York, el 24 de enero de 1946. 
Stravinsky escribió el siguiente comentario sobre la Sinfonía en Tres Movimientos:
La sinfonía fue escrita bajo la impresión de los eventos mundiales. No diré que expresa mis sentimien tos acerca de ellos sino que, sin participar en lo que considero mi voluntad, despertaron mi imaginación musical. Y las impresiones que me activaron no fueron generales, ni ideológicas, sino específicas: cada episodio de la sinfonía está relacionado en mi imaginación con una impresión cinematográfica específi  ca de la guerra. 
El final hasta contiene el génesis de un plan de guerra, aunque lo acepté como tal recién después de que la composición estuvo terminada. El principio del movimiento es parcialmente, y en una forma inextricable, una reacción musical ante los noticiosos cinematográficos y las documentales que he visto sobre esos soldados que marchan a paso de ganso. El rígido compás de marcha, la instrumentación para banda de bronces, el grotesco crescendo en la tuba, todo ello está relacionado con esas imágenes aborrecibles...
Predomina la música de marcha hasta la fuga, que es la éxtasis y el punto de inflexión. La inmovilidad al comienzo de esta fuga es cómica, creo, y de este modo, para mí, constituye la derrota de la arrogan cia de los alemanes cuando falló su maquinaria. La exposición de la fuga y el final de la sinfonía están acorde en Re bemol final, un poco demasiado comercial- en lugar del Do esperado- de alguna manera demuestra mi excesiva exuberancia ante el triunfo de los Aliados. La figura (rítmica ) fue desarrollada a partir  de la rumba en la parte de los timbales en la introducción, hasta el primer movimiento. De algu  na manera, inexplicablemente, en mi imaginación está asociada con los movimientos de las máquinas de guerra. 
Asimismo, el primer movimiento fue inspirado por un film de guerra, en vez sobre las tácticas de tierra calcinada desarrolladas en China. La parte central del movimiento fue concebida como una serie de conversaciones instrumentales para acompañar a una serie de escenas cinematográficas que muestran al pueblo chino arañando y escarbando sus campos. La música para el clarinete, piano y cuerdas, que cre
ce en intensidad y volumen hasta la explosión de tres acordes... y la que entonces comienza desde el principio otra vez, todo eso  está asociado en mi mente con este documental chino. 
La sustancia formal de la sinfonía- "Tres Movimientos" sería un título más exacto- explota la idea de un juego cruzado entre varios tipos de elementos contrastantes. Uno de estos contrastes, el más evidente, es el arpa y el piano, los principales protagonistas instrumentales. Cada uno de ellos tiene un amplio papel 
obbligato y un movimiento completo para sí y recién en el punto de inflexión de la fuga, la queue de poisson de los nazis, se les oye a ambos juntos y solos.
Pero suficiente con esto. A pesar de lo que ha dicho, la sinfonía no es programática. Los compositores combinan notas. Eso es todo. No está en ellos decir cómo y en que forma se imprimen en su música las cosas de este mundo. 
Acerca del génesis del segundo movimiento, Stravinsky escribió: "A menudo me encontraba en compa
ñía de Franz Werfel. Ya en la primavera de 1943, el distinguido poeta y dramaturgo intentó alentarme para que escribiera la música para su película Song of Bernadette. Me sentí atraído por la idea y por su libreto, y si las condiciones, tanto comerciales como artísticas, no hubieran estado tan totalmente a fa  vor del productor de la película, podría haber aceptado. En realidad sí compuse música para la escena "Aparición de la Virgen", y esta música se convirtió en el segundo movimiento de mi Sinfonía en TresMovimientos"
Stravinsky también remarcó que el primer movimiento estaba concebido originalmente como un con
cierto para orquesta, y que el tercer movimiento en algún momento fue pensado como concierto para piano. Los esbozos de la obra, sin embargo, no confirman estas afirmaciones. 
La sinfonía se inicia con un rasgo vigoroso que ha desconcertado a muchos comentaristas por su falta de integración posterior dentro del movimiento. Robert Craft, el director que durante muchos años ac
tuó como asistente de Stravinsky, explica que los esbozos indican que esta figura fue compuesta casi al final. Este movimiento es extremadamente rítmico en toda su extensión. Los ritmos son asimétricos y fascinantes. Para que concentremos nuestra atención en ellos, Stravinsky mantuvo el material melódico
en un mínimo y modifico las armonías lentamente. El resultado es un mosaico de gestos rítmicos. Den
tro de cada sección, al armonía es reiterada o alternada y la textura es relativamente constante. Perma
nentemente aparecen nuevas permutaciones rítmicas. Por ejemplo, después que concluye el rasgo ini
cial, hay un breve pasaje con un ritmo repetitivo simple en los clarinetes, que acompañan varias exposi
ciones de un importante motivo en los cornos. Entonces, sin advertencia previa, cambian la armonía , la textura y el ritmo. Mientras las cuerdas bajas repiten el motivo del corno aparentemente sin fin( con lo 
cual hacen que la armonía no cambie), las cuerdas altas, a las que se unen el piano y luego los vientos, tocan variaciones irregulares en una figura rítmica simple. Tan de improviso como comenzó, esta sec
ción da lugar a otra, en la que toda la orquesta desarrolla variantes rítmicas del motivo básico. El final es bastante desusado: toda la orquesta mantiene un séptimo acorde en Do mayor bellamente espaciado,
mientras solamente el clarinete bajo reitera un ritmo de una nota repetida. 
El segundo movimiento es discontinuo, pero de manera menos agresiva que el primero. Es más melódi
co, menos obstinado en sus ritmos, y menos áspero en sus armonías. Pero el énfasis en el ritmo persiste.
La sección más sorprendente es aquella en la que las cuerdas y el arpa solista tocan una figura simple en rítmico unísono (en la recapitulación lo hacen los vientos y el arpa). Un breve interludio conecta los movimientos segundo y tercero.
El final vuelve al entusiasmo rítmico y la estasis armónica del primer movimiento. La forma nuevamen
te es una serie de secciones inconexas. La primera, para orquesta completa, da paso inesperadamente a un pasaje semejante a un scherzo que se inicia solamente con dos fagotes. En el centro del movimiento está la "inmovilidad" cómica de la fuga. El tema curiosamente estático aparece en el piano, con alguna ayuda del trombón. Ritmos regocijantes conducen al movimiento a su cierre. 
La sinfonía en Tres Movimientos tipifica la mayor parte de la música de Stravinsky escrita entre princi
pios  de la década de 1920 y mediados de la década de 1950. En este estilo denominado "neoclásico" el compositor generalmente, pero no siempre, tomó modelos del pasado y los convirtió en propios. Algu
nos de sus modelos fueron piezas específicas de otros compositores, pero la mayoría fueron tipos gene
rales, estilos particulares o formas específicas. El autor recompuso la música de manera que se convir  tió en absolutamente moderna y singularmente personal. La música neoclásica de Stravinsky no es imi  tativa. Más bien trató de demostrar como los artificios e idiomas de la composición más antigua podían seguir siendo utilizados en el siglo XX. Esta es música sofisticada, porque está haciendo una afirma ción con respecto a otra música. Para apreciar su neoclasicismo cabalmente, es necesario estar bastante familiarizado con los modelos para comprender en qué medida Stravinsky los está adaptando y en qué medida lle está inyectando su propia personalidad. 
La música neoclásica a veces es llamada crítica musical en notas en vez de palabras. Cuando utiliza las
armonías clásicas en formas no clásicas, está haciendo un comentario sobre qué es tonalidad y qué lo es. Cuando utiliza formas que implican movimiento, pero las congela utilizando mesetas armónicas es táticas, está señalando la arbitrariedad de la modulación musical.
Los modelos de Stravinsky incluyen a las óperas de Verdi, a la música de los ballets franceses del siglo XIX, los conciertos clásicos para piano, los Conciertos Brandeburgueses de Bach, la música de Brod
way y las misas medievales. La Sinfonía en Tres movimientos es especial entre las obras neoclásicas, porque su modelo es la propia música anterior del mismo compositor. De este modo vuelve su mirada, con la sofisticación de la madurez, la entusiasmo de la juventud, especialmente representada en La Con
sagración de la Primavera. Seguramente no es coincidencia que, justo antes de componer ala sinfonía, estuviera trabajando en una revisión de ese ballet.
Hay muchas características que la sinfonía tiene en común con la música de ballet anterior: los ostina
tos no desarrollistas, las formas discontinuas, las armonías estáticas, los ritmos permutativos, los acor
des ásperos y la partitura brillante. Pero sería un error considerar a la sinfonía como un retorno a un es
tilo anterior. Stravinsky estaba observando el estilo desde la distancia. Estaba demostrando cómo puede someterse a estos elementos para crear la más clásica de las formas, una sinfonía. Si la Sinfonía en Tres
Movimientos no es tan excitante como su modelo, esto es adrede. Stravinsky se apartó de la inmediatez
de su estilo más temprano para dar paso a una versión sofisticada del mismo, bidimensional pero sutil. La animación de la sinfonía corresponde solamente a la superficie. Debajo de esa yace una elegancia se
rena, mientras que al excitación de la Consagración es total, aunque menos sofisticada. Foto subida de Internet. 
De mi libro "Invitación a la Música" de Jonathan Kramer.  





                                                                             


                                                                                

                                            Sinfonía en Tres movimientos de Igor Stravinsky      




                          


                                                                             

                                                                             Igor Stravinsky

domingo, 23 de mayo de 2021

Origen de Hans Zimmer


                                                                      Origen

Dom Cobb es especialista en el arte de de la usurpación de los secretos de la gente mientras están in
conscientes. Y por esa razón, él se ha convertido en un hombre muy importante en el mundo del espio naje. Pero gracias a eso, ahora es un fugitivo y no puede tener una vida normal. Para volver a esa vida, él tiene que crear una imagen en vez de extraerla. pero existe una gran dificultad porque hay alguien que adivina siempre sus movimientos, y solamente él podrá desenmascarar a esta persona. Fotos subi das de Internet. 
Protagonistas
Leonardo DiCaprio: Dominick Cobb
Marion Cotillard: Mal
Michael Caine: Miles
Robert Fischer: Cillian Murphy
Joseph- Gordon Levitt: Arthur
Tom Berenger: Browning
Hans Zimmer
  Compositor alemán de bandas sonoras para el cine y pionero en la integración de música electrónica y arreglos orquestales tradicionales. Ganador de múltiples premios cinematográficos como los Bafta Em
my, Globos de Oro , Saturny Gramis. También gano un Oscar en 1988 por la película Rain Man y en otras 7 ocasiones. Y por el Rey León en 1994.       



                                                                    



                                          Banda sonora de la película Origen de Hans Zimmer




                                                                                   

                                                                             Hans Zimmer





                                                                            Hans Zimmer

                                                       


                                                                                   


                                                                                    Origen 

                                                                                          



viernes, 21 de mayo de 2021

Sinfonía en Do de Igor Stravinsky

                                                                    Sinfonía en Do 

La Sinfonía en Do fue iniciada en el otoño de 1938 y terminada en Hollywood, California, el 19 de agosto de 1940. La carátula reza: "Esta sinfonía, compuesta para la Gloria de Dios, está dedicada a la Orquesta Sinfónica de Chicago, en ocasión del Quincuagésimo Aniversario de su existencia". Stravins  ky dirigió el estreno en Chicago, el 7 de noviembre de 1940. 
Aunque sea difícil de sospechar al escuchar la obra, la Sinfonía en Do fue compuesta en un periodo es
pecialmente difícil para Stravinsky. Empezó su obra en París, durante el otoño de 1938. Tiempo más tar
de recordaba:
Todo el primer movimiento lo escribí allá, en mi apartamento de Rue St Honoré, pero en noviembre in
terrumpí el trabajo para realizar una rápida gira de conciertos por Italia. Sin embargo, cuando llegué a Roma, una llamada de mi hijo mayor desde París me informó que el estado (por la tuberculosis) de (mi
hija) Mika se había agravado súbitamente, y al día siguiente, el 30 de noviembre, cuando yo mismo lla
mé a París desde la estación de ferrocarriles de Turín, recibí la terrible noticia de que había fallecido. No es exagerado decir que durante las semanas siguientes sólo pude continuar con mi propia vida gra
cias al trabajo que estaba haciendo con la Sinfonía en Fo. Pero no traté de superar mi dolor describiendo o dando expresión a ese dolor en la música y en vano intentarán, creo yo, encontrar rastros de este tipo de emoción personal.
Y apenas tres meses más tarde, nuestra casa volvió a convertirse en una morgue. Catherine, mi esposa, falleció el 2 de marzo de 1939. Entonces, porque no podía quedarme entre las cosas que me rodeaban, y
además porque se me había advertido acerca de la gravedad de mi estado, me mudé a Sancellmoz, el sa
natorio donde habían estado mi esposa y Mika y donde mi hija Milena... iba a pasar los seis años si
guientes. Permanecí en esta montaña aburrida y en absoluto mágica durante los cinco meses siguiente, salvo por breves ausencias, una de las cuales fue para asistir al sepelio de mi madre, que falleció el 7 de junio. 
Por tercera vez en seis meses escuché el largo servicio de Requiem, caminé por los campos en las afue
ras de París. hasta el cementerio de St Geneviéve, arrojé un puñado de tierra a una tumba abierta. Por tercera vez me salvé, o por lo menos me recuperé, componiendo. El segundo movimiento, iniciado en Sancellmox hacia fines de marzo, quedó terminado allí en agosto. No creo que sus formalidades clási
cas delaten más acerca de mis sentimientos personales de dolor que el primer movimiento...
La conmoción creada por la guerra, aunque no fue trágica ni terrible en mi caso, no obstante constituía
un ambiente difícil para la composición. El tercer movimiento, compuesto en Cambridge, Massachu
setts, y el cuarto movimiento, compuesto en Hollywood, son de un espíritu muy diferente de los dos pri
meros, la mitad europea me temo que la sinfonía esté dividida por medio. Por un lado, el primer movi
miento es el único larago en todo el inventario de mis obras maduras sin un cambio de métrica, en tanto que las irregularidades métricas del tercer movimiento están entre las más extremas entre todas mis com
posiciones. 
En el relato precedente, extrañamente parece que el dolor de Stravinsky por la muerte de su hija y la ma
dre fue mayor que el que sintió por el fallecimiento de su esposa. En realidad, para 1939, Catherine Stra
vinsky era su esposa sólo de nombre. Hacia ya más de una década que el compositor tenía una relación amorosa con Vera Bosset. Esta relación no era ningún secreto para Catherine, y ella y Ver en realidad se habían hecho amigas. Vera fue el único verdadero amor en la vida del compositor. Fue su compañera ca
si constante durante cincuenta años. La muerte de Catherine les permitió casarse. Cuando Stravinsky se mudó al sanatorio Aancellmoz, después del deceso de Catherine, Vera se reunió con él allí. Cuando se trasladó definitivamente a Estados Unidos al año siguiente, Vera le siguió al poco tiempo. Se casaron  en 1940 en Massachusetts, donde Stravinsky estaba dando clases en Harvard y trabajando en el tercer movimiento de la sinfonía. Ese verano se mudaron a California, que habría de convertirse en el lugar de residencia del compositor, allí terminó la Sinfonía. 
El relato de Stravinsky sobre la Sinfonía en Do prosigue de la siguiente forma:
¿Qué puedo decir de una partitura que es tan poco misteriosa y tan fácil de seguir en todos los niveles y en todas sus relaciones? La respuesta es que los críticos (que también deben ganarse la vida) encontra
rán una gran cantidad de nada que decir, llegando a comparaciones artificiales con otra música, luego llamando la atención sobre la severidad del diatonicismo a la vez que rastrean el desarrollo del motivo en el primer movimiento y me acusan de paso, de coherencia(la que me gusta, porque solamente los compositores mediocres son coherentes, así como sólo los realmente buenos son capaces de ser muy malos). También descubrirán mi supuesto uso de un canto y acompañamiento italianizante en el segun
do movimiento, y del fugato n los dos últimos movimientos, y revelarán la existencia de una suite de danzas en el tercer movimiento y de flirteos con el ballet en otros movimientos.  
El compositor también podría haber mencionado los solos de vientos en el segundo movimiento, que evocan las sinfonías concertantes del siglo VXIII, y la forma sonata en el movimiento de apertura. Estas referencias a estilos y formas de épocas anteriores son típicas de la música de Stravinsky entre 1930 y 1955, su periodo denominado neoclásico. Las obras neoclásicas en un principio fueron recibidas con burla: parecía que el compositor le estaba dando la espalda a los estilos excitantes, coloridos y de inspiración folclórica de la Consagración de la Primavera y Petrouchka. Su aproximación al pasado era vista como una regresión, un cauteloso retroceso con respecto a su notorio estilo de avanzada. En lugar de la barbarie de la Consagración, los públicos de las décadas de 1920, 30 y 40 oyeron la estudiada sofisticación de obras como la Sinfonía en Do y el Concierto para Violín. En realidad el compositor no estaba retrocediendo. Se había dado cuenta de que  el primitivismo de la Consagración y el colorido panorama de Petrouchka eran limitados y que era necesario crecer tomando nuevas direcciones. En va rias de estas piezas más tempranas existen ocasionales reinterpretaciones de la tradición (el vals de Pe trouchka, por ejemplok, es absolutamente neoclásico) en sus últimos años Stravinsky eligió desarrollar extensamente este aspecto de su estilo que hasta ese momento había pasado prácticamente desapercibi do. 
La música neoclásica reinterpreta los sonidos, procedimientos y formas de la composición musical del periodo clásico. El neoclasicismo de Stravinsky no es una vuelta al pasado, ni un intento de sugerir la forma en que Haydn, por ejemplo, podría haber escrito en 1940, y tampoco es un pastiche de citas. Es un homenaje a la tradición. La Sinfonía en Do es la visión de Stravinsky sobre las sinfonías de Haydn y Beethoven; no es una imitación sino un comentario personalizado. Es como algunas pinturas de Pica
sso: el sujeto es reconocible, pero en vez de estar representado en forma realista está distorsionado por el filtro de la propia personalidad del artista. Stravinsky, como Picasso, transformó su sujeto al reinter
pretarlo. Una cara de Picasso no se parece a alguna cara que hayamos visto jamás, pero sin embargo es una cara; la Sinfonía en Do no se parece en nada a una obra orquestal de Beethoven, pero sin embargo es una sinfonía clásica. La Sinfonía en Do evoca la era clásica por su título, su orquesta modesta(para las pautas de Stravinsky),la regularidad métrica de sus movimientos exteriores, sus pasajes diatónicos, su utilización de formas tradicionales y sus armonías aparentemente simples. Pero Stravinsky no adopta nada del pasado sin cambiarlo: la orquesta tradicional produce su sonido de carácter único, la métrica regular contiene sus ritmos irregulares típicos, el diatonismo no llega a construir tonalidad, las formas clásicas son utilizadas como moldes abstractos que se llenan con procedimientos no clásicos y las armonías no se relacionan entre sí en la forma típica. Comparando la Sinfonía con el estilo orquestal de fines del siglo XVIII, comprendemos la naturaleza del clasicismo musical; al observar cómo pueden comportarse los elementos tradicionales en formas no tradicionales, aprendemos a escuchar lo que es verdaderamente distintivo acerca de la manera dieciochesca. La Sinfonía en Do es música acerca de otra música. 
En la música de épocas anteriores, las armonías progresan hacia otras armonías Por el contrario, los so
nidos de Stravinsky a menudo no progresan sino que más bien permanecen estáticos o simplemente se alternan. Sus sonoridades pueden parecer congeladas en el tiempo en vez de moverse a través del tiem po. De este modo el uso de la forma sonata en el primer movimiento no es orgánico. La forma sonata tradicionalmente se ocupa de oposición de dos fuerzas, representadas no solamente por temas contras tantes sino también por claves diferentes. La conciliación de estas fuerzas es la meta de la forma.
Pero en vez de oposición dramática, la Sinfonía en Do presenta una simple yuxtaposición. Como las ar
monías no progresan, no existe conflicto; porque no están en conflicto, el movimiento esencial de la for
ma sonata- el impulso hacia la recapitulación- está ausente . La recapitulación del material inicial sim
plemente sucede, en lugar de ser la culminación de todo el movimiento. 
En un artículo fascinante sobre la sinfonía, B.M Williams escribe:
"Mientras el compositor romántico, como Beethoven, utiliza la forma sonata para comentar emociones personales y públicas y para atrapar al oyente en una continuidad de eventos que cambien rápidamente, ( la música de Stravinsky) está más próxima a las artes verdaderamente estáticas de la escultura y la ar
quitectura que a la música, que es dinámica, cuyas partes están en constante movimiento en el caleidos
copio del cambio". Al congelar las armonías, las melodías y las secciones en lo progresiones estáticas, Stravinsky separó los sonidos y las formas clásicas del significado clásico. Nos permite oír tríadas sim
ples, tríadas diatónicas y formas sonata en estado puro, no al servicio de la progresión tonal. De este mo
do, la Sinfonía en Do es verdaderamente una obra sofisticada. Aunque se le pueda apreciar por sus tona
das atractivas, sus ritmos pegadizos y su orquestación brillante, existe un nivel más profundo. Si la oímos como la opinión idiosincrática de Stravinsky de las sinfonías de Haydn y Beethoven, podemos comprenderla como una anomalía histórica: un contacto directo entre los estilos del siglo XVIII y el siglo XX sub referencia a la continuidad histórica intermedia. Foto subida de Internet. 
De mi libro "Invitación a la Música" de Jonathan Kramer







                                                                                     

                                                                       Sinfonía en Do
                                                                              
 



                                                                            

                                                                            Igor Stravinsky 

                                                                               


































                                                                      Sinfonía en Do        








                                                                                                                        

                                                                   

                                                              









domingo, 2 de mayo de 2021

La Canción del Ruiseñor de Igor Stravinsky



                                                               La Canción del Ruiseñor

La canción del Ruiseñor fue compuesta en 1917. Stravinsky  terminó la partitura el 4 de abril en Mor ges, Suiza. La música está basada en la ópera El Ruiseñor, compuesta en 1908-1914. El estreno del poe ma to nal fue dirigido por Ernest Ansermet con la Orchestre de la Suisse Romande, en Ginebra, el 6 de diciembre de 1919. 
Cuando todavía era un alumno de composición de Rimsky Korsakov, a Stravinsky se le ocurrió la idea de basar una ópera en el cuento de hadas de Hans Christian Andersen El Ruiseñor. El composición ela
boró el libreto de 1908 y le mostró el primer acto a su maestro unos pocos meses después. Rimsky Kor sakov lo aprobó. Sin embargo, antes de tener oportunidad de trabajar en los dos actos restantes, Stravins ky recibió una serie de encargos de ballet: El Pájaro de Fuego, Petrouchka y La Consagración de la Pri  mavera. Estas obras catapulta ron al joven compositor a la fama mundial. En el proceso de escribirlos, desarrolló su primer estilo maduro, que es colorido, a veces disonante, rítmicamente irregular y que des de el punto de vista melódico está en deuda con la música folclórica rusa. 
Uno de los resultados de su recién adquirida fama fue que recibiera más encargos. En 1913 el Teatro Li  bre de Moscú le hizo a Stravinsky una oferta generosa para que terminara El Ruiseñor. El compositor se sentía reacio a volver sobre la ópera, porque su estilo había sufrido un cambio radical durante los cuatro años transcurridos. Sin embargo, los honorarios jugosos eran tentadores y el compositor razonó que la ausencia de acción en el primer acto lo separaba desde el punto de vista dramático y, por lo tanto, podía ser apropiado una clase de música diferente. La ópera de 45 minutos fue concluida en 1914 y producida no en Moscú( el Teatro Libre había quebrado), sino en la Ópera de París.
Stravinsky no estaba totalmente satisfecho. Le seguía molestando la brecha de cuatro años  que media ba entre la composición del primer acto y del segundo. Además, tenía dudas acerca de la ópera en gene  ral. 
En una entrevista que se le hizo en 1913, declaró: "Me desagrada la ópera. La música puede estar apa  reada con el gesto o con las palabras... pero no con ambos sin que constituya bigamia. Es por eso que la parte artística de la ópera es equivocada." Muchos años después escribió: "Tal vez el Ruiseñor pruebe  solamente que hacía bien en componer ballets puesto que todavía no estaba listo para una ópera."
A principios de 1917 el empresario Sergei Diaghilev le sugirió producir El Ruiseñor como ballet. El  compositor se sintió interesado. "Había estado pensando en hacer un poema sinfónico para orquesta  combinando la música de los Actos Segundo y Tercero de El Ruiseñor, que eran homogéneos, y le dije a Diaghilev que los pondría a su disposición si le interesaba hacer un ballet con él. Aceptó calurosamen  te la sugerencia y yo adapté una ambientación del cuento de hadas de Andersen que sirviera para ese propósito."
La obra resultante, El Canto del Ruiseñor, omite el Primer Acto en su totalidad y partes de los Actos Segundo y Tercero; otras partes han sido compuestas nuevamente. La voz del Ruiseñor esta remplazada por el solo de flauta y el solo de violín. 
Debido a la guerra, la producción del ballet se demoró hasta 1920, cuando fue presentado por los Ba llets Rusos de Diaghilev, en la Ópera de París. El coreógrafo fue Leonid Massine y el diseñador del de  corado fue Henri Matisse. En el ínterin, una premiere orquestal no escenificada, realizada en 1919, ha  bía provocado violentas protestas de parte del público suizo. 
La ambientación de Stravinsky para el ballet, adaptada de Andersen , es la siguiente:
El Festival en el Palacio del Emperador de la China. El palacio está adornado festivamente en honor del Ruiseñor que canta con tanta dulzura. Las paredes y el piso, que son de porcelana, brillan bajo la luz de miles de lámparas de oro. Las flores más gloriosas han sido colocadas en los pasillos;   Hay corridas de aquí para allá y una corriente de aire, de manera que las campanas suenan fuertemente. El Ruiseñor es colocado en una percha de oro y una Marcha China señala la entrada del emperador. 
Los Dos Ruiseñores. El Ruiseñor canta tan ruidosamente que los ojos del emperador se llenan de lágri mas. Los lacayos y las doncellas informan que también están satisfechos; eso es mucho decir, porque 
son los más difíciles de complacer. Llegan enviados del emperador de Japón con el regalo de un ruise  ñor mecánico. Cuando se le da cuerda al pájaro artificial, canta una canción. Su cola se mueve hacia arriba y hacia abajo y refulge con el brillo de la plata y el oro. Tiene tanto éxito como el ave real y es mucho más bonito. Pero¿ dónde está el Ruiseñor viviente? Nadie se ha dado cuenta de que este ha salido volando por la ventana abierta. Fuera de las puertas se oye al pescador, que canta gozoso porque su amigo ha regresado.
Enfermedad y Recuperación del Emperador de la China. El pobre emperador apenas puede respirar. Abre los ojos y ve que es la Muerte la que está sentada sobre su pecho y que se ha puesto la corona de  oro y sostiene en una mano la espada del emperador y en la otra su hermoso estandarte. Todo a su alrededor, entre los pliegues de los cortinados de terciopelo espléndidos, espían cabezas extrañas. Estos son todos los actos buenos y malos del emperador. Tanto es lo que le dicen que empieza a correrle transpiración por la frente. El pájaro mecánico se rehúsa a cantar. Entonces se oye al pequeño Ruiseñor viviente que canta afuera de la ventana. A medida que canta los espectros empalidecen cada vez más. Hasta la Muerte escucha y dice: "¡prosigue, pequeño Ruiseñor, prosigue!" Y la Muerte entrega cada uno de sus tesoros por una canción y sale flotando por la ventana bajo la forma de una bruma blanca y fría. El emperador cae en un sueño reparador. El sol brilla sobre él a través de la ventana. Se despierta fresco y recuperado. Se oye una Marcha Fúnebre mientras los cortesanos entran a ver al emperador muerto. Se detienen asombrados. El emperador les dice: ¡Buen día!" Entretanto, el amigable Ruiseñor ha volado de regreso hasta donde está el pescador y se le oye cantar nuevamente su canción.
El canto del Ruiseñor es típica de los primeros ballets de Stravinsky, aunque pertenece más al mundo colorístico de El Pájaro de Fuego que al mundo violento de La Consagración de la Primavera. Como los ballets más conocidos, es un mosaico de secciones diferentes que apenas tienen una transición entre ellas. La escala pentatónica( por ejemplo, las notas negras de un piano) está empleada frecuentemente para subrayar la ambientación china.
Stavinsky era un maestro de la orquestación, capaz de crear combinaciones espectaculares de timbres  orquestales. Su imaginación en lo que hace a la sonoridad se percibe en cada página del Canto del Rui  señor, desde el poderoso ascenso inicial de los cornos, el piano y las arpas hasta su conclusión serena en el solo de la trompeta apoyado por las arpas y las cuerdas. Ya sea escribiendo una textura solista  transparente o una textura totalmente orquestada, la inventiva de Stravinsky continuamente produce  nuevas experiencias sonoras. El solo de violín de El Ruiseñor, alto en la cuerda de Sol, no es sino un ejemplo de su agudo sentido de sonoridad. 
La forma de mosaico es apropiada no solamente por el carácter episódico del ballet sino también por el estilo de la orquestación. Cuando las sonoridades avanzan hacia las siguientes, tendemos  responder  más a este movimiento que a los sonidos que las componen. Por otra parte, cuando un compositor desea que  oigamos los sonidos por su propia belleza intrínseca, este minimiza la progresión de y a otros tim bres. El resultado es una serie de sonoridades interesantes que no se trasladan, ni por transposición ni transformación, a otras texturas. 
El abordar la forma en mosaico constituya una de las innovaciones de largo alcance de compositores de principios del siglo XX tales como Stravinsky, Debussy, Satie e Ives. No es ninguna coincidencia que estos compositores, por nacimiento y por elección, estuvieran fuera de la corriente de la tradición ger mánica de formas apretadamente entrelazadas que siempre avanzan en progresión. El Canto del Ruise ñor puede no haber sido la composición más influyente de Stravinsky, pero tipifica una nueva estética que llegó a adquirir más significado para los compositores posteriores. Foto subida de Internet. 
De mi libro" Invitación a la Música" de Jonathan Kramer.
                             


                                                                   

                                                                 


                                    La Canción del Ruiseñor de Igor Stravinsky 



                                                                             

                                                                            Igor Stravinsky